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Reviven la legendaria obra de Mozart
Por. Alberto Robledo Cervantes
Torreón, Coahuila
Mozart sigue presente en las partituras de la Camerata de Coahuila. Una vez más el músico de Salzburgo ocupó con sus composiciones un Teatro Nazas a medio llenar.
Esta ocasión las obras interpretadas fueron la Obertura a La Clemenza di Tito KV. 621, la Sinfonía Concertante para Alientos en Mi bemol Mayor KV. 297b y para cerrar la Sinfonía No 40 en Sol menor KV. 550.
La segunda de las obras de esta noche tuvo de solistas los alientos de Borja Pareja, en el oboe, César Encina, con el clarinete, Salvador Llin, tocando el corno francés y en el fagot a Konstantin Melik-Vr Atanesyan. Además estuvo como directora invitada Roswitha Heintze, de Alemania.
A su vez, esta composición viene acompañada de un mito que a la fecha no ha sido ni afirmado ni desmentido. Los expertos dicen que la obra en inicio el lugar que ahora tiene el clarinete, cuando fue escrita lo ocupaba una flauta.
Sin embargo, antes del estreno de la obra, Ludwig Von Kochel, quien catalogó todas las obras de Mozart, perdió las partituras. Esto hizo que al final se tocaran cosas diferentes durante el concierto.
Pero la historia ahí no acaba. Años después, Von Kochel encontró las partituras perdidas. Estas no tenían la caligrafía de Wolfgang Amadeus, sino las de un desconocido, por lo que se rumora que esta obra no fue escrita por el compositor austriaco, aunque aún no está comprobado.
La última de las piezas interpretadas, la Sinfonía No 40, es considerada como la gran sinfonía en Sol menor debido a su perfecta composición, que es sinónimo de equilibrio y orden.
Asimismo la sinfonía está compuesta de manera dialéctica, es decir que en las subdivisiones de la canción encontramos una tesis, una antítesis y una síntesis, esto quiere decir que la obra tiene un protagonista y a un antagonista enfrentándose dentro de ella.
Los rumores e interpretaciones de las composiciones de Mozart dejan ver al personaje paradigmático que fue y su indudable genio, es por esto que la Camerata de Coahuila de dedica estos conciertos, para no olvidar lo plácidas y perfectas que son sus obras.
Fuente: Milenio.com